CONGREGACIÓN DE MISIONEROS OBLATOS DE LOS CORAZONES SANTÍSIMOS

NADIE TE AMA COMO YO

Cuánto he esperado este momento, cuánto he esperado, que estuvieras así
Cuánto he esperado, que me hablaras, cuánto he esperado, que vinieras a mí.

Yo sé bien lo que has vivido
Sé también porque has llorado
Yo sé bien lo que has sufrido, pues de tu lado no me he ido.

/Pues nadie te ama, como yo /2
Mira la cruz, esa es mi más grande prueba,
Nadie te ama como yo.

/Pues nadie te ama, como yo /2
Mira la cruz, fue por ti fue por que te amo
Nadie te ama, como yo.

Yo sé bien lo que me dices
Aunque a veces no me hables
Yo sé bien lo que en ti sientes
Aunque nunca lo compartes.

A tu lado he caminado,
Junto a ti yo siempre he ido
Aun a veces te he cargado
Yo he sido tu mejor amigo.

/Pues nadie te ama, como yo /2
Mira la cruz, esa es mi más grande prueba,
Nadie te ama como yo.

/Pues nadie te ama, como yo /2
Mira la cruz, fue por ti fue por que te amo
Nadie te ama, ni te amará como yo.

Fuente: https://youtu.be/MY9zu_E2920

NADIE TE AMA COMO YO MÁS MÚSICA RELIGIOSA EN INGLÉS MÁS MÚSICA RELIGIOSA EN FRANCÉS MÁS VILLANCICOS

Más música en Catalán

SALMO 92

SALMO 92, 1-3

Bueno es dar gracias a Yahveh, y salmodiar a tu nombre, Altísimo,
Publicar tu amor por la mañana, y tu lealtad por las noches,
Al son del arpa de diez cuerdas y la lira, con un susurro de cítara.

SALMO 92, 4-6

Pues con tus hechos, Yahveh, me regocijas, ante las obras de tus manos grito:
«¡Qué grandes son tus obras, Yahveh, qué hondos tus pensamientos!»
El hombre estúpido no entiende, el insensato no comprende estas cosas.

SALMO 92, 7-9

Si brotan como hierba los impíos, si florecen todos los agentes de mal, es para ser destruidos por siempre;
Más tú, Yahveh, eres excelso por los siglos.
Mira cómo tus enemigos perecen, se dispersan todos los agentes de mal.

SALMO 92, 10-12

Pero tú alzas mi frente como la del búfalo, derramas sobre mí aceite nuevo;
Mi ojo desafía a los que me acechaban, mi oído escucha a los malvados.
Florece el justo como la palmera, crece como un cedro del Líbano.

SALMO 92, 13-15

Plantados en la Casa de Yahveh, dan flores en los atrios del Dios nuestro.
Todavía en la vejez producen fruto, se mantienen frescos y lozanos,
Para anunciar lo recto que es Yahveh: mi Roca, no hay falsedad en él.

SALMO 95

SALMO 95, 1-3

Venid, cantemos gozosos a Yahveh, aclamemos a la Roca de nuestra salvación;
con acciones de gracias vayamos ante él, aclamémosle con salmos.
Porque es Yahveh un Dios grande, Rey grande sobre todos los dioses;

SALMO 95, 4-7

En sus manos están las honduras de la tierra, y suyas son las cumbres de los montes;
suyo el mar, pues él mismo lo hizo, y la tierra firme que sus manos formaron.
Entrad, adoremos, prosternémonos, ¡de rodillas ante Yahveh que nos ha hecho!
Porque él es nuestro Dios, y nosotros el pueblo de su pasto, el rebaño de su mano.

SALMO 150

SALMO 150, 1-3

Alabad a Dios en su santuario, alabadle en el firmamento de su fuerza,
Alabadle por sus grandes hazañas, alabadle por su inmensa grandeza.
Alabadle con clangor de cuerno, alabadle con arpa y con cítara,

SALMO 150, 4-6

Alabadle con tamboril y danza, alabadle con laúd y flauta,
Alabadle con címbalos sonoros, alabadle con címbalos de aclamación.
¡Todo cuanto respira alabe a Yahveh! ¡Aleluya!.

NADIE TE AMA COMO YO