Tercer domingo de Adviento que nos invita a renovar la alegría, la esperanza y la fe.
Domingo para reconocer que en Jesús la fidelidad de Dios se hace carne, se manifiesta en amor y en sanación. Dios, en Jesús se acerca, viene a sanarnos y hace que en medio de las dificultades la esperanza y la alegría brillen.
Jesús está cumpliendo a cabalidad su tarea. Jesús tenía clara su misión. De hecho, cuando leyó en la Sinagoga el texto del profeta Isaías Él se reconoció como aquel en el cual todo lo anunciado se cumplía. La promesa de un mesías hecha por el Padre Dios; lo anunciado por los profetas se cumplía en Él que había sido ungido por el Señor, por el que había sido enviado a predicar la buena noticia a los pobres, a liberar a los cautivos, a sanar a los enfermos. Jesús es buena noticia, plenitud de vida, Mesías. Jesús es Dios mismo entre nosotros y haciendo lo que le es propio a Dios amar y hacer el bien.
Juan Bautista espera que el Mesías haga todo lo que hace Jesús, pero piensa que debe ser de otra manera, tal vez con un cierto alejamiento de la gente, distante de los pecadores públicos y haciendo cumplir estrictamente la ley, aquella interpretada por tantos maestros y fariseos. Pero los hechos hablan por sí y eso debe tranquilizar a Juan y a sus discípulos.
Jesús reconoce públicamente a Juan como el hombre más grande en la historia de la salvación
Es profeta, mensajero, precursor; es humilde, pobre, sencillo. Como Juan bautista nosotros debemos ser y debemos poner todo nuestro empeño por entrar y perseverar en el reino de los cielos. Dios, en su hijo, nos dignifica, nos engrandece, nos llena de posibilidades. Y como Juan nos hace precursores de su propio hijo.
Vivamos con alegría cada momento de la vida; la paciencia todo lo alcanza y porque sabemos que el Señor llega sabemos permanecer en amor y en fidelidad en Él. La alegría viene de la certeza de saber que el Señor siempre está con nosotros. Nuestra espera tendrá recompensa. Los planes de Dios son perfectos.
Con mi bendición:
P. Jaime Alberto Palacio González, ocd.
Lo más leído: Las 20 oraciones destacadas en www.oblatos.com
3. 15 minutos en compañía de Jesús sacramentado
4. Oración de una mujer por la salud de su esposo
7. Oración para antes de leer la biblia
8. Oración para antes de un viaje
9. Oración por los padres difuntos
11. Nueve domingos al divino niño Jesús
16. Oración antes de la confesión
18. Oración para antes de tomar una decisión
19. Ave María en varios idiomas
20. Coronilla de la divina misericordia

Fuente: P. Jaime Palacio
Más reflexiones del Padre Jaime Alberto Palacio González, ocd
