CONGREGACIÓN DE MISIONEROS OBLATOS DE LOS CORAZONES SANTÍSIMOS

PARA ESTA SEMANA DICIEMBRE 26 DE 2016

PARA ESTA SEMANA DICIEMBRE 26 DE 2016

Feliz Fiesta. Feliz Navidad.
Es Navidad, un feliz día para todos; una semana llena de bendiciones y de alegrías. Una semana para la paz y para permitir que el Dios del amor colme con su gracia, a través de nosotros, a cada uno de nuestros seres queridos.

Dios tomó la decisión de amarnos, de perdonarnos, de caminar con nosotros, decisión que se hizo y se sigue haciendo realidad, en su hijo Jesús; realidad en la que participaron personas llenas de fe que le fueron abriendo a Dios sus corazones y sus vidas, que le creyeron y estuvieron seguras de la fidelidad de Dios.

Es Navidad y por lo tanto es la fiesta del amor, de la ternura, de la alegría, de la misericordia. El que era en el principio ahora nos llena con su presencia. El dueño de las cosas, de la vida y del amor; por el que todo fue hecho, la Palabra eterna del Padre, ha venido a encontrarnos, a recuperarnos. Somos de Él, fuimos hechos para Él, a Él le dolemos y le ofenden y duelen nuestras faltas y por eso nos amó hasta el extremo. Se hizo fragilidad sin necesidad de pecar, se hizo humanidad para sentir el amor y también el desamor. Se hizo muerte para darnos vida y nació en un pesebre para que nosotros fuéramos reyes. Jesús fiel al proyecto del amor, sabe llegar con dignidad al final. Jesús resucitado sigue naciendo en el corazón de quien le acoge y se sigue haciendo pan para el que tiene hambre de eternidad, es decir, ansias infinitas de llevar a Dios en el corazón.

La Palabra pronunciada en el amor, pronunciada por Dios, es Jesús; la Palabra que toma carne es Jesús; la Palabra por la que todas las cosas fueron hechas y en las cuales todas deben existir se llama Jesús. Y esta Palabra es fecunda, incluyente; contiene el germen de la vida, de salvación, de amor entregado.

Es Navidad tiempo para volver a la alegría, esa que se siente cuando se está enamorado; tiempo para seguir unidos en la familia, para aumentar los vínculos de la solidaridad. Es Navidad, la fiesta del amor, de la entrega, de la humildad y de la sencillez; por eso es el tiempo de recuperar el amor que se ha ido enfriando, recuperar la relación de pareja que se ha llenado de rutinas poco provechosas. Navidad para abrazar, para sonreír y sobre todo para sentir que somos familia, somos parte los unos de los otros.

Mirarnos y tener tiempo para cada uno siempre será una fiesta, será Navidad.

Con mi bendición:

P. Jaime Alberto Palacio González, ocd.